Cuando llega el ladrón… no pierdas tu PAZ!!

Hace unos días tumbaron la puerta de nuestra casa y entraron a ver que podían tomar, no tomaron la gran cosa, no encontraron la gran cosa que buscaban… pero si tomaron algo importante…

Tu hogar es un lugar seguro, es tu refugio, es donde el descanso espera, es tu techo para cada estación del año, habla de tu persona, de tu intimidad, refleja la bendición de Dios, está la presencia de Dios… ese espacio privado fue invadido. ¿Qué tomaron? Nada material de gran costo, pero si algo interno que no tiene precio, PAZ… esta aun cuando no se ve, aun cuando se pudiera tener o no, siempre se puede perder!!  

Cada noche cada ruido me despierta, cada día no puedo dejar de pensar (solo cuando se que Ale está sola en casa) en nuestra casa. Hemos vuelto nuestro rostro a Dios en esta situación, pudimos simplemente dejar la casa e ir a otro lado, pero la verdad no hubo otro lado disponible, trajo a mi mente aquellas personas perseguidas que no tienen a dónde ir, simplemente permanecen.

Dios solo nos dijo:, “bástate mi Gracia… nunca, de cierto te digo, nunca ni en la más peligrosa situación, ni de manera remota pienses que te DEJARÉ, no Me ves, pero Me verás, de oídas Me habías oído, ahora Me conocerás”. Dicen las estadísticas que la hora en la cual el sueño es más profundo son las 3 de la mañana, de ahí que muchos ladrones usan esa hora para su “honrado trabajo”, casualmente desde ese día, cada noche despierto a las 3 am, la hora cuando el ladrón trabaja, Dios me despierta, me llama a orar, me llama a buscar su rostro, a levantar mis manos y adorarle!! entonces vuelve a ser nuestro refugio, entonces la intimidad vuelve, entonces si, le veo y me deja ver lo bendecidos que somos estando juntos… Entonces, solo entonces la PAZ viene y el ladrón de nuestra paz se va… y tiene razón Le estoy conociendo mas ¡!!